(Narra
Michelle)
-¿En serio te vas hoy? – asintió. – Joder More… No tienes
nada que hacer en Madrid, quédate unos días más. – negó. – No entiendo tu
necesidad te quererte ir. Lo hemos
pasado muy bien estos días. El concierto, tía. Fue alucinante. No te vayas.
-Me estás haciendo perder el tiempo. Tengo que terminar
la maleta. – se movía de un lado a otro de la habitación. Había decido
levantarme pronto y estar a primera hora en el departamento de Zayn para
intentar convencerla. Unos días atrás habíamos estado cenando juntos en mi casa
y Louis había hablado conmigo, explicándome su mal comportamiento y pidiéndome
perdón. Obviamente yo también me había disculpado porque tampoco estuve muy
amigable con él los últimos meses. Dejando el tema zanjado volvíamos a ser los
de siempre y aprovechamos para hablar con Zayn. Me rompió el corazón cuando me
pidió que convenciera a su novia para quedarse unos días. Ellos tendrían una
semana de vacaciones antes de su próximo concierto y quería disfrutar de ella
como se merecía. Mimarla, llevarla a pasear, dedicarse a ella las 24 horas del
día. Y aquí estaba yo, viéndola cerrar la maleta, enfadada. Cansada de que no
la dejemos hacer lo que ella quería, de que no respetáramos sus decisiones. – Mierda. – murmuró. Dirigí mi mirada donde
ella la tenía, justo en la mesita de noche. Cuatro portarretratos con una foto
en ellos. – Me quería llevar está. – me la dio después de haberla cogido. Esa
foto era de hacía exactamente una semana, en mi casa. Zayn había hecho una foto
del abrazo que nos dimos a modo reconciliación, dejando en el olvido los malos
rollos. Estábamos sonriendo de oreja a oreja con Nere en medio tocando su
tripa. – No me cabe nada más.
-Seguro que hacemos sitio. – negó. – Entonces, déjala
aquí y dile a Zayn que te la pase, cuando llegues a Madrid la imprimes y se
acabó el problema. - me miró quitándome la foto dejándola en su sitio. Se centró
ahora en la que aparecía con Zayn, este la abrazaba por la espalda dándole un
beso en la mejilla y ella salía haciendo una mueca. - ¿Por qué la mueca? –
pregunté.
-Justo el día anterior habían venido sus hermanas de
Bradford a pasar unos días después de las navidades ¿recuerdas que te lo conté?
– asentí riéndome. Ahora recordaba el por qué. – Safaa me hizo caer por las
escaleras. – se rió. – Pero fue sin querer, esos días siempre los recordaré.
Fue muy divertido tenerlas aquí.
-¿Nunca se los ha dicho a Zayn?
-¿Qué me caí? – asentí aguantándome la risa. Ella me lo
había contado detalladamente y había sido más su culpa que la de la pequeña
Safaa. – Claro… y decirle: “Como nos
aburríamos, no se me ocurrió otra mejor cosa que sacar el colchón de la habitación
de invitados y ponerlo en las escaleras para empujarnos unas a otras como si de
un tobogán de verdad se tratara. Y debido a eso casi me rompo la espalda pero
no te rías, Zayn. Estoy bien. Solo que no esperé el momento adecuado y caí sin
el colchón”. – solté una carcajada imaginándomela. - “¿Y
Sabes otra cosa, amor? Mi amiga Michelle no hace otra cosa que reírse ¡de mi
cuando se lo cuento!”
-Lo siento, lo siento pero tuvo que ser muy gracioso.
¿Cómo no esperaste a que lo colocaran bien?
-Me la estaba pasando muy bien y quería repetir. – hizo
puchero mientras me miraba. Me acerqué a ella y la abracé. – Además es que ha
Waliyha le hacía ilusión hacernos una foto con su nuevo super iphone y no le
iba a decir que no.
-Claro y tampoco le ibas a decir a Zayn que no buscara
otra pose ¿no? –negó mientras se separaba de mi. Le sonreí. – Te voy a echar de
menos, More.
-Y yo a ti. A todas. – miró la hora. – Aún me quedan unas
cuantas horas. El vuelo sale a las ocho. Podemos ir a pasar el resto del día
por ahí y luego ya me voy.
-¿Quién te recogerá? – pregunté. Después de que me
contestara que “nadie”, insistí aún
más de que se quedara por lo menos hasta el día siguiente, para uno que saliera
por el día. Pero su respuesta fue un “No”
rotundo. Dejé de insistir y salimos a casa de Niall para encontrarnos con las
chicas esperándonos. Los chicos habían salido a grabar unas escenas para una
nueva película que iban a sacar. Pasamos toda la tarde juntas con el pequeño
Jack que estaba triste porque no quería que su tía More se marchara. Ella le
explicó muy detalladamente que volvería en menos de lo que él se lo imaginara y
después de hacerlo sonreír nos dimos cuenta de que eran las cinco. Las chicas
se despidieron de ella porque no nos quería a ninguna en el aeropuerto. Yo la
acompañaría a su casa y la dejaría en la entrada del aeropuerto. Tampoco me
quería llorando porque se iba. A regañadientes me despedí de ella una vez que
el taxi aparcó delante de la entrada principal de Heathrow. Llamé a Zayn para decirle que se
había ido y él me colgó. ¿Qué le pasaba?
Llegué a casa dejando el paraguas en la entrada. Nada más
abrir la puerta un delicioso olor a dulce azotó mi cara. Sonreí. Estaba
cocinando. Caminé hasta la cocina encontrándome con un sonriente Liam, aunque
lo intentaba ocultar, algo le preocupaba. Me acerqué para darle un pequeño beso
en los labios. Me abrazó por la cintura impidiendo que me separara de él. Me
reí volviéndolo a besar con lentitud, moviendo mis labios a su ritmo. Su lengua
rozó mi labio inferior al mismo tiempo que yo le agarraba la cara para
profundizar el beso a la vez que nuestras lenguas habían empezado a saborearse
la una a la otra. Unos segundos después un ruido procedente de la sala nos
obligó a separarnos. Le miré confundida.
-Mi hermana ha venido esta tarde y… - antes de que
pudiera terminar un rabo moviéndose asomó por la puerta de la cocina, entrando
por completo en ella. Lo miré confundida. Una vez que entró por completo a la
cocina, lo miré sonriendo. Era un precioso Husky Siberiano. Liam recogió al cachorro y acarició su pequeña
cabeza. – Verás… Loki tiene tres meses.
-Es precioso. – le di un pequeño beso en los labios y
después acaricié a Loki, él movió el rabo dando un pequeño ladrido. – Bienvenido
a la familia Payne.
-¿En serio no te importa? – negué sonriendo. Por eso era
su preocupación, era un tonto. – Gracias.
-No es nada. Será un placer cuidar a nuestro pequeño.
¿Has comprado sus cosas?
-Nicola me ha traído todo. Una pequeña cama, comida, juguetes…
¡Ah! y me ha dejado esto para ti. – salió unos segundos y después volvió con un
sobre y una bolsa.
-¿Qué es? – pregunté curiosa, se encogió de hombros. Abrí
la bolsa encontrándome con unos preciosos zapatos de tacón. Tenía un muy buen
gusto para la moda.- Me encantan. – Liam me sonrió dejando a Loki estar por
casa mientras me dedicaba a abrir el sobre. Dentro había una especie de mini
carta.
“Babe! Antes he pasado por Zara y me han encantado
estos zapatos y he pensado ¿Por qué no comprárselos a mi preciosa cuñada?
Espero que te gusten. Supongo que Liam ya te habrá presentado a Loki, sé que
amas la idea de tenerlo en casa y siento si te has enfadado pero en serio, te
hará compañía cuando Liam… ya sabes… este de gira. Bueno, dejémonos de cosas tristes.
Loki te amará y tu a él. He llevado todo lo necesario, que Liam te lo enseñe,
te encantará. La cama lo que más. ¡Ya lo verás! Siento no haberte esperado pero
tenía prisa. Te quiero babe. Cuida de mi hermano, ya sabes que a veces es un poco patoso y nunca
se sabe.”
Liam me miraba con una ceja levantada. Nicola era un caso
aparte pero la quería mucho. Me reí internamente. Perfectamente sabía que me
encantaría tener a Loki en casa pero lo había puesto porque claramente Liam la
leería y así lograría que se sintiera un poco mal y yo tendría que animarlo.
Era una listilla. Se la enseñé riéndome.
-No me puedo creer que te haya escrito esto. ¿Quieres que
nos quedemos con Loki? – me preguntó serio.
-Sí. Amo que esté aquí. Como te he dicho antes, es más
que bienvenido a la familia. – le di un beso en el pecho tranquilizándolo. –
Enséñame lo que ha traído para el peque. – Salimos hacia nuestra habitación y
me encontré con una pequeña camita para Loki. Me fijé bien y sonreí de oreja a
oreja. En la parte de delante había puesto un “Loki Payne” en uno de
los laterales “Liam and Michelle” en el otro lateral “Daddy Direction and Lady Glamour” y en la parte de atrás un “I love You” – Nicola tenía razón. Me hago fan de la cama de Loki. – le
miré riéndome. Él me miraba con ternura y cuando menos me lo esperé nuestros
labios se habían convertido en uno.
(Narra
Niall)
Zayn me había pedido que lo llevara al aeropuerto para
despedirse de More. Habíamos pasado el día grabando para nuestra nueva película
y cuando acabamos, cerca de las tres, él y yo decidimos pasar la tarde que nos
quedaba relajados jugando al golf, mucha gracia no le hizo pero quería
distraerse antes de ir a despedir a More. Le pilló de sorpresa la llamada de
Mitchie diciéndole que ella ya se había ido. Así que salimos lo más rápido
posible del club y nos pusimos en camino. Nada más llegar bajo corriendo y yo
busqué un sitio para aparcar. Me hice un par de fotos con algunas fans antes de
entrar y a lo lejos vi a Zayn y a More que lo abrazaba. Achiné un poco los ojos
y parecía que ella lo consolaba. Definitivamente estaba llorando. Me acerqué a
pasos rápidos. Acababan de avisar a los pasajeros con destino a Madrid.
-Niall. – dijo sonriéndome. La amistad que ella y yo
teníamos se había deteriorado un poco pero seguíamos siendo muy buenos amigos.
-¿Has venido a despedirte de mí? Creí que ya me habías olvidado.
-¿Tu eres tonta? Sí, eres tonta. – dije riéndome. - ¿Cómo
me dices eso? Nunca te olvidaría, creo que es al revés. Ya casi ni me hablas.
-Es que pensé que te habías enfadado conmigo. – la miré
con una ceja levantada. – ¿No es así? – negué riéndome.
-Llámame cuando llegues ¿vale? Y así volvemos a los
viejos tiempos. – sonrió asintiendo. – Ven aquí, anda. – la abracé unos
segundos antes de dejársela otra vez a Zayn. Estaba triste y no me gustaba nada
que esté así. Diez minutos después, estábamos en el coche yendo para su casa.
-¿Estás bien?
-No.
-¿Puedo hacer algo por ti? – negó mirando por la ventana.
– Me puedo quedar esta noche contigo si quieres.
-No hace falta.
-¿Estás seguro?
-Sí. - ¿en serio te
crees que me voy a tragar tal mentira, amigo?
-Vale, Zayn. Suéltalo ya. Ya estás acostumbrado a que
More esté de aquí a Madrid y viceversa ¿Qué ha cambiado ahora? – abrió la boca
para decir algo pero lo interrumpí. – Y no me digas que nada porque aquí hay
algo más. Suspiró bajándose del coche. Hice lo mismo poniéndole seguro y
subiendo a su casa, me había dejado la puerta abierta, cerré la puerta una vez
dentro.
-Estoy en mi habitación, ven.
-Dímelo. – dije sentándome.
-Úrsula esta aquí. – abrí los ojos sorprendido. – Hace
tres días cuando bajé a tirar la basura, la vi sentada en el parque de abajo.
Me dijo que no me había olvidado y que no pensaba si quiera hacerlo. – fruncí
el ceño intentando comprender algo. – Me quiere a su lado. Me ha dicho que va
a…
-¿A por More? – asintió asustado.
-Me ha enseñado unas fotos mías con ella. Algo
comprometedoras y temo que se las enseñe, Nialler. Si lo hace, perderé a mi
novia. – su voz se quebró.
-¿Qué tipo de fotos?
-En la cama. – Ahora sí que no entendía nada. ¿Cuándo
habían estado juntos? Yo le conocía muy bien, entre los cinco no había secretos
y si hubiera pasado algo, estaba segurísimo que nos lo hubiera contado pero… – Son
falsas. – Dijo sacándome de mis pensamientos.- Hace más de tres años que no la veo…
-¿Crees que sea capaz? – pregunté incrédulo. No tenía que
contestarme. Claro que era capaz. Aún no se me quitaba de la cabeza que lo que
pasó en Toledo con More y conmigo no fue un simple accidente. Algo me decía que
Caroline y ella tenían mucho que ver. Varias veces había hablado con Nerea
sobre mis sospechas y ella también lo pensaba aunque ese era otro tema. - ¿Qué
vas hacer? – se encogió de hombros con los ojos llorosos. – Lo mejor será que
vayas a pasar estos días con ella a Madrid. Zayn, siempre es ella la que viene
a por ti y tú no has ido a visitarla desde hace tres años. ¿No crees que ya va
siendo hora de ir?
-Tengo miedo. Su madre me pidió cuidarla y no quiero
fallarle pero… - suspiró nuevamente. – Sabes cómo es la prensa, van a empezar
con los cotilleos y eso a ella no le gusta.
-Sigo sin entender.
-¡Joder Niall! ¡No es tan difícil! – “siento ser un tonto, Zayn” – No viajo a Madrid porque allí los
cotilleos son el entretenimiento de los demás, empezaran rumores y las
directioners, los managers, mi familia, su familia… sería un lio, tío. La
última vez que viaje fue para el concierto que tuvimos hace siete meses y aún
así metieron mierda. Por poco cortamos.
-¡¿Qué?! ¿Cómo es que no sabíamos eso? – pregunté. Nunca
supimos nada al respecto.
-Eso da igual ahora. Por eso hable con Michelle para que
la convenciera de quedarse unos días más y así… - claro, teníamos una semana
libre. - ¡Dios! ¿Por qué todo tiene que ser tan complicado? Úrsula va hacer
algo malo, lo presiento, rubio. Y ella… ella la creerá y la perderé. – estaba
diciendo idioteces. ¿Desde cuando Zayn era tan inseguro? – No puedo ir.
-Oh, sí. Claro que iras. Claro que iremos. – dije seguro
de mis palabras. Zayn me miró confundido y yo solo me limité a sonreír.
Unas horas después nos encontrábamos en un avión. Mi
novia aceptó encantada volver. Zayn y yo compartíamos las mismas inseguridades
respecto a nuestras novias pero esta vez él se estaba pasando. Pame y More eran
las únicas que aún no se habían mudado a Londres. Mi novia lo haría este verano
pero More por lo que me contaba ella, no pensaba hacerlo todavía. Una hora más
y mi novia nos llevaba en un taxi a su casa. Recordaba esta dirección. Fue
donde las recogimos la primera vez, cuando las invitamos a cenar y donde empezó
todo.
-Venga, pasad… no
tenemos la peste ni nada de eso. – solté una carcajada. Zayn por su parte
estaba nervioso, se le notaba. – Dejad las maletas en el pasillo de la entrada.
¡More! – gritó. - ¡Estoy en casa! – se escucharon pasos procedentes de otro
pasillo. Entonces la vimos aparecer. Llevaba puesto un pijama de cuadros y si
no recuerdo mal… era el mismo que le había regalado Zayn hacía dos años por su
cumpleaños. Lo recordaba entre otras cosas porque yo lo ayudé, en la camiseta
había puesto un “I love You, More” y
en el pantalón de forma vertical un “Zayn
te ama” en español. Sonreí mirándolo pero no podía decir lo mismo del
moreno. Él la miraba completamente confundido. Esta vez la miré y tenía los
ojos rojos e hinchados.
-¿Qué ha pasado More? – le dijo mi novia acercándose.
Ella negó mirando a su novio.
-¿Qué haces aquí? ¿Vienes a burlarte de mí? ¿Otra vez?
¿Una vez más?
-¿Que dices mi amor? – le respondió él. Con pasos largos
estaba en frente de ella, acariciando su cara. - ¿Qué te pasa? ¿Por qué lloras?
– More apartó la cara alejándose de él pero no se lo permitió. – ¿Qué te pasa,
joder?
- He visto las fotos. – ¡mierda! Úrsula no había tardado
nada en engañarla con sus mentiras. Zayn dejó caer sus brazos a ambos lado de
su cuerpo, su cara había cambiado completamente. - ¿Cómo has podido hacerme
esto?
-Son falsas. Te lo juro, créeme por favor. – Zayn estaba
inundado en lágrimas mientras que ella se mantenía seria. Para ellos nosotros
habíamos desaparecido, habían olvidado que estábamos allí presenciando la
escena. Pamela me miró sin entender nada, entrelacé nuestros dedos
tranquilizándola. – Por favor… déjame explicártelo. Necesito… necesito que me
creas. – la abrazó unos segundo para después besarla. – Te lo puedo explicar…
-Vamos. – dijo secamente caminando por el pasillo, había
sonada tan fría. Zayn me miró y le hice medio sonreí.
-Cuéntaselo todo. No te dejes nada. – le aconsejé. – No
la dejes ir. No la pierdas Malik. - Este asintió limpiándose las lágrimas antes
de desaparecer por el pasillo.
-¿Qué está pasando? – me preguntó mi novia. Me acerqué
para besarla. La miré unos segundos sonriendo. ¿Cómo había tardado tanto en
darme cuenta de que era ella desde el principio? Siempre pensé que esa
sensación extraña que tenía cuando la veía con Sandy o con otros era porque la
quería proteger y en parte era por eso pero la realidad era que siempre había
estado enamorado de ella. Volví a besarla. - ¿Me lo vas a explicar?
-¿Dónde está tu habitación? – se rió cogiéndome de la
mano mientras me llevaba. – Te quiero. – susurré en medio del pasillo, paró en
seco y me besó.
-Yo también, cielo.
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